Dicen que todos los días se aprende algo. Hoy no solo he aprendido algo, sino que también he podido disfrutar de la personalidad de la novelista Espido Freire. Amable, accesible, atenta, cercana… Gracias Espido y Pedro por esta magnífica mañana.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

A %d blogueros les gusta esto: